Dejar de fumar es difícil. Pero puede ser un poco más fácil si tiene un plan. Cuando crea que está listo para dejar de fumar, puede seguir algunos de estos pasos sencillos para poner su plan en marcha.
Decida la fecha para dejar de fumar
El primer paso para dejar de fumar es escoger cuándo quiere dejarlo. Aquí hay unos consejos para ayudarle a escoger el día en que va a dejar de fumar.
- Tómese su tiempo para prepararse. Prepararse puede ayudarle a desarrollar la confianza y las habilidades que necesitará para mantenerse sin fumar.
- No lo retrase por mucho tiempo. Elegir una fecha muy lejana le da tiempo para cambiar de opinión o estar menos motivado. Elija una fecha que no esté a más de una semana o dos de distancia.
Decida por qué va a dejar de fumar
Antes de renunciar, es importante saber por qué lo está haciendo. ¿Quiere estar más saludable? ¿Ahorrar dinero? ¿Mantener a su familia a salvo? Si no está seguro, hágase estas preguntas:
- ¿Qué es lo que no me gusta de fumar?
- ¿Qué me pierdo cuando fumo?
- ¿Cómo afecta a mi salud el tabaco?
- ¿Qué nos pasará a mí y a mi familia si sigo fumando?
- ¿Cómo mejorará mi vida cuando deje de fumar?
¿Aún no está seguro? Cada persona tiene una razón diferente para dejar de fumar. Prepárese para dejar de fumar pensando por qué quiere dejar de fumar.
Aprenda a manejar sus antojos y desencadenantes
Los desencadenantes son personas, lugares o actividades específicas que le hacen querer fumar. Conocer los desencadenantes puede ayudarle a aprender a manejarlos.
Los antojos son impulsos de fumar cortos pero intensos. Por lo general, sólo duran unos minutos. Planee con anticipación y haga una lista de actividades cortas que puede hacer cuando tenga un antojo.
Encuentre maneras de manejar la abstinencia
Durante las primeras semanas después de dejar de fumar, es posible que se sienta molesto y desee fumar. Estos síntomas desagradables al dejar de fumar se conocen como abstinencia. La abstinencia es común entre los fumadores que dejan de fumar, ya sea que lo estén haciendo de manera repentina o con la ayuda de medicamentos, asesoría u otras herramientas.
Durante la abstinencia, el cuerpo se está acostumbrando a no tener nicotina de los cigarrillos. Para muchas personas, los peores síntomas de abstinencia duran de unos días a unas pocas semanas. Durante este tiempo, usted puede:
- Sentirse deprimido
- Tener dificultad para dormir
- Sentirse irritable, frustrado o de mal humor
- Sentirse ansioso, nervioso o inquieto
- Tener dificultad para pensar claramente
Es posible que sienta la tentación de fumar para aliviar estos sentimientos. Sólo recuerde que son temporales, no importa lo intensos que se sientan en ese momento.
Una de las mejores maneras para manejar la abstinencia de la nicotina es probar el tratamiento de reemplazo de nicotina (TRN). El tratamiento de reemplazo de nicotina puede reducir los síntomas de abstinencia, y puede duplicar sus probabilidades de dejar de fumar para siempre. El TRN se encuentra en formas diferentes, incluyendo goma de mascar, parche, aerosol nasal, inhalador y caramelo duro. Muchos están disponibles sin receta médica.
Se ha realizado mucha investigación sobre el tratamiento de reemplazo de nicotina. Se ha demostrado que es seguro y eficaz para casi todos los fumadores que quieren dejar de fumar, incluyendo los adolescentes. Pero si usted tiene una condición médica grave o está embarazada, hable con su médico acerca de usar el tratamiento de reemplazo de nicotina.
Si planea usar el tratamiento de reemplazo de nicotina, recuerde tenerlo a la mano el día que deje de fumar. Lea las instrucciones del paquete de NRT y sígalas al pie de la letra. El tratamiento de reemplazo de nicotina le dará el mayor beneficio si lo utiliza según lo recomendado.
Explore sus opciones para dejar de fumar
Es difícil dejar de fumar por su cuenta, pero dejarlo de manera repentina no es su única opción. De hecho, elegir otra opción puede mejorar sus posibilidades de lograrlo. Mire estas opciones:
- Pruebe un programa de mensajes de texto. Inscríbase en SmokefreeTXT en español en línea o escriba el texto ESP al 47848.
- Hable con un experto en la línea para dejar de fumar. Llame a la línea para dejar de fumar del Instituto Nacional del Cáncer al 1-877-44U-QUIT (1-877-448-7848) de lunes a viernes de 9:00 a.m. a 9:00 p.m., o llame a 1-855-DEJÉLO-YA (1-855-335-3569) para averiguar el número de la línea para dejar de fumar en su estado.
- Hable con un asesor para dejar de fumar. El chat en vivo LiveHelp es de lunes a viernes de 9:00 a.m. a 9:00 p.m. hora del este.
Dígale a su familia y a sus amigos que planea dejar de fumar
Dejar de fumar es más fácil cuando las personas que lo rodean le brindan su apoyo. Dígales que planea dejar de fumar y explíqueles cómo pueden ayudar. Aquí hay algunos consejos:
- Dígale a su familia y amigos las razones por las cuales quiere dejar de fumar.
- Pídales que le pregunten de vez en cuando cómo le va.
- Pídales que le ayuden a pensar en actividades que puedan hacer juntos en las que no se pueda fumar como ir al cine o a un buen restaurante.
- Pídale a ese amigo o familiar que fuma que deje de fumar con usted. O al menos que no fume alrededor suyo.
- Pídale a sus amigos y familiares que no le den un cigarrillo, sin importar lo que haga o diga.
- Cuéntele a sus amigos y familiares de que puede estar de mal humor mientras deja de fumar. Pídales que sean pacientes y que lo ayuden a superarlo.
El apoyo es una de las claves para lograr dejar de fumar. No tema pedir ayuda. ¡No tiene que hacerlo solo!